PSICOLOGIA DE LA VIOLENCIA
CAUSAS PREVENCIÓN Y AFRONTAMIENTO
Volumen 1
1 Libro Autor Marco Eduardo Murueta y
Mario Orozco Guzmán
EDITOR MANUAL MODERNO
Segunda edición 2014
LIBRO POR ENCARGO
Los
esfuerzos de los gobiernos para tratar de detener o “abatir” a los delincuentes
son claramente insuficientes. Filósofos, antropólogos y psicólogos importantes
han considerado que los seres humanos son agresivos por naturaleza, pero hay
otros que opinan todo lo contrario, que la agresividad es una enfermedad. En esta
obra, un conjunto de destacados psicólogos analizan diferentes facetas de las
expresiones violentas que se viven actualmente y proponen alternativas
realistas para superarlas
EN LA INTRODUCCIÓN:
La
mañana del 28 de febrero de 2012, Javier tomó el taxi acostumbrado para ir al
banco a cambiar el cheque de su pago quincenal como profesor – investigador de
tiempo completo en la carrera de psicología social de la UNAM Iztapalapa. El
chofer le era muy conocido por lo que tuvieron una conversación amena durante el
trayecto de ida y vuelta; comentarios sobre la familia y sobre la situación
social en el país y en la Ciudad de México, aderezados con ironías y bromas que
emergían del buen humor y la bonhomía característica de ambos. Mientras se despedían
frente a la puerta principal de la Universidad no se percataron de que una
motocicleta montada por dos jóvenes pasó junto a ellos y se detuvo unos 10
metros adelante. En segundos, Javier escuchó palabras altisonantes que le
exigían el dinero, y al chofer poner la cara sobre el volante. Teniendo un pie
fuera del auto, apenas pudo reponerse y obedeció la orden. Murmuró alguna frase
sobre lo injusto y como respuesta recibió un disparo que lo derribo y generó
enorme consternación y un vacío irreparable a su familia, a sus amigos, a sus
estudiantes, a la comunidad universitaria de la UAM, al gremio de psicólogos
mexicanos y latinoamericanos, a la ciudad y al país. ¿Cómo alguien puede tener
la frialdad para generar tanto daño con esa facilidad? Javier, junto con Tere u
un equipo de investigadores y estudiantes que él coordinaba, tenían varios años
trabajando y analizando el porqué de la violencia, preocupados por el
crecimiento tanto cuantitativo como cualitativo de este fenómeno en México y en
el mundo en la primera década del Siglo XXI. Ya no era solamente la conocida
violencia de los gobiernos priistas contra aquellos que no se apegaban a la
voluntad del presidente o del gobernador o contra los que se oponían a los
abusos sociales, económicos y políticos, a quienes se ordenaba encarcelar,
torturar y / o asesinar, según el humor y el estilo personal de gobernar del
poderoso en turno. No se trataba tampoco de la violencia ejercida para obtener
un beneficio económico a través del asalto a transeúntes, el robo a casas u
oficinas o el asalto bancario, en los cuales los delincuentes explícitamente
evitaban tener víctimas mortales o heridos cuando no era necesario para
alcanzar sus fines económicos. En estos años, en México hemos tenido
expresiones de violencia “innecesaria” y cruel, de terrorismo que se solaza con
el sufrimiento. Ese motociclista, atrapado semanas después, ya tenía el dinero
en sus manos; podría haberse ido y ya
Durante
el siglo XX creció muy rápidamente el consumo de drogas en todo el mundo, especialmente
en estados Unidos. De tal manera que desde los años 70, la venta clandestina de
marihuana y cocaína se convirtió en uno de los negocios más prósperos al mismo
tiempo que los productos agrícolas tradicionales de los países latinoamericanos
perdían “competitividad” ante la industria agrícola norteamericana. En lugar de
exportar maíz y frijol, que eran productos típicos de México, comenzó a
importarlos. Primero Colombia, luego Perú y después México dedicaron cada vez
más hectáreas a la exportación de drogas prohibidas, principalmente hacia los
estados Unidos. Por exigencias del gobierno de este país, los latinoamericanos
dedicaron muchos recursos a la persecución de los narcotraficantes.
Absurdamente, los gobiernos de Colombia y México han presumido, cada vez, de
acabar con más plantíos, quemar más toneladas de droga, confiscar más armamento
y más dinero en efectivo, detener a más capos de cárteles importantes y
“abatir” (asesinar) y encarcelar a más delincuentes que los gobiernos
anteriores. No parecen darse cuenta de que eso no es un dato exitoso, sino lo
contrario
En
México, en 2006, después de un evidente fraude electoral y con una supuesta
ventaja de apenas 0.56 por ciento, Felipe Calderón, con mucha dificultad, pudo
tomar protesta como Presidente de la República Mexicana en un convulsionado
paralelamente rodeado de multitudinarias muestras de rechazo popular. De manera precipitada y como una búsqueda
desesperada de legitimarse en el poder, decidió “declarar la guerra a los
narcotraficantes”, a la “delincuencia organizada”. Resolvió a retomar y, en
mucho, copiar la política de Álvaro Uribe en Colombia, quien se preciaba de
haber debilitado a los capos colombianos de la droga al mismo tiempo que a las
Fuerzas Armadas Revolucionaras de Colombia (FARC). Uribe, Calderón y muchos
otros gobernantes de derecha no entendieron que la debilitación de los narcos
colombianos tuvo como principal causa el surgimiento de los cárteles mexicanos
con grandes ventajas competitivas de varios tipos y no el Plan Colombia
suscrito con estados Unidos. Como en Colombia, Calderón subió salarios y compró
más armas al ejército y a la marina, suscribió con los estados Unidos el plan
Mérida para que ese país donara recursos económicos y militares a México para
el combate al narcotráfico, dirigió a las fuerzas armadas para suplir a las
policías que estaban ya muy coludidas e infiltradas por los narcos, promovió
modificaciones a la legislación para
aumentar las penalidades a los delitos. Hizo de la “guerra al narcotráfico” y a
la “delincuencia organizada” el tema prioritario y obsesivo de su cuestionada
gestión
Seis
años después ñas cifras reflejaron la brutalidad vivida durante ese fatídico:
entre 60 y 80 mil personas fueron ejecutadas, un promedio de familias
afectadas, viudas, huérfanos, padres y hermanos dolientes. Vacíos emocionales,
económicos y sociales que trastornaron la vida de familias y comunidades. El
Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) registró más de 95,000
asesinatos en ese periodo
Adicionalmente,
hubo más de 10,000 personas desaparecidas atribuibles a la delincuencia
organizada, mientras los secuestros e incrementaron en cerca de 400 por ciento,
de acuerdo al Consejo Ciudadano para la seguridad Pública y la Justicia Penal.
En un Informe del Grupo Multisistemas de Seguridad Industrial se concluyó que
“en los primeros cuatro meses de 2012, los secuestros que terminaron en
asesinato de las víctimas pasaron de 17.1 a 46.4 por ciento, en comparación con
el mismo periodo de 2011, siendo Nuevo león, Jalisco, Distrito Federal, estado
de México y Sinaloa los estados con mayor incidencia de ese delito”
renunciaron
y se ocultaron para evitar correr una suerte similar
Se
dijo entonces que los cárteles mexicanos se habían fortalecido con exmilitares
de élite guatemaltecos conocidos como los Kaibiles, “terribles
máquinas de matar” entrenados como Rangers por el ejército de Estados Unidos, quienes
habían generado la costumbre de la decapitación de sus víctimas para infundir
terror en el pueblo y contra los guerrilleros de la Unidad Revolucionaria
Nacional Guatemalteca (URNG), durante las dictaduras de Efraín Ríos Montt (1982
– 1983) y Óscar Humberto Mejía Victores (1983 – 1986). Precisamente fue a
finales de los años 90, bajo el nuevo gobierno civil de Álvaro Arzú Irigoyen en
Guatemala, cuando miles de esos aiiibiles fueron dados de baja del ejército. Al
verse sin “empleo”, muchos de ellos se pusieron al servicio de los cárteles del
narcotráfico mexicanos que cada vez tenían mayor fortaleza económica porque ya
no sólo trasportaban la droga producida en Colombia sino que ahora también eran
productores con ventajas competitivas por la cercanía con los Estados Unidos y
las facilidades que daba la progresiva complicidad de funcionarios de alto
nivel de los gobiernos federal, estatales y municipales de México
Así,
a diferencia de los narcotraficantes colombianos que en los años 80 y 90 se
asociaron con grupos guerrilleros que defendían causas sociales (las FARC), en
México solamente se rumora que algunos narcotraficantes hacen obras de
beneficio a las comunidades para conseguir su apoyo y no ser delatados, pero de
2006 a 2012, cada vez más se han impuesto por la vía del terror mediante
torturas, mutilaciones, vejaciones, asesinatos, descuartizamiento, exhibición
pública y la denigración de los cadáveres, junto con mensajes amenazantes. Al
finalizar la primera década del Siglo XXI, esas prácticas formaban parte ya de
las noticias cotidianas que, por un lado, generaron un creciente sentimiento
social de zozobra y temor, y, por otro, habituaron a la población a ver con
“naturalidad” todas esas atrocidades. Se comenzó a hablar de un “narcoestado” o
de un “estado fallido” porque el gobierno no lograba aplicar las leyes,
investigar y sancionar a un mínimo porcentaje de los autores de cientos de
miles de delitos. Por el contrario, también los militares, policías y gobernantes
desde entonces han sido insistentemente señalados por delinquir de manera
impune
México,
con sus “muertas de Juárez” y sus descuartizados, se convirtió en uno de los
países más violentos del planeta, superando las cifras de países involucrados
en guerras declaradas como Irak, Afganistán o Palestina. Lo peor es que no
parece haber salida o mitigación de esa espiral infinita de violencia. Todos
los días se habla de ejecuciones masivas, descubrimientos de grupos de
cadáveres en fosas clandestinas o autos abandonados, enfrentamientos armados y
balaceras en diferentes ciudades, bloqueos con autobuses y tráileres
incendiados, secuestros y extorsiones. Dolor y desesperación de pueblos y
familias combinados con cierta habituación social e indolencia por este tipo de
noticias en quienes todavía no han tenido daños directos
Han
quedado rebasadas las enormes marchas por la paz. Se han hecho obsoletos los
grandes y suntuosos eventos oficiales para garantizar la seguridad pública. Se
ven impotentes las organizaciones y consejos ciudadanos para exigir garantías
de seguridad y una adecuada impartición de justicias. Tampoco ha logrado algo
significativo el Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad que ha recogido
múltiples testimonios y ha acentuado su demanda de atención a las víctimas de
toda esa violencia
Mientras,
los gobiernos se siguen jactando de sus planes estratégicos y el valor
–rodeados de militares pertrechados- con el que enfrentan a la delincuencia
¿Qué
es lo que pasa en la mente de los criminales?
¿Cómo
se llega a esos niveles de sangre fría?
¿Qué
se puede hacer para darle otro cauce a ese proceso de la descomposición social?
¿Es
posible?
Para
muchos es parte de la vida y de la naturaleza humana, como –dicen- lo demuestra
toda la historia
¿Cómo
entender si n las grandes batallas de aqueos y troyanos narradas hace casi tres
mil años por Homero?
¿No
es por esa naturaleza humana que se explican las guerras helénicas, el ánimo de
conquista de Darío y de Alejandro y luego las guerras púnicas?
¿Fue
la naturaleza humana la que se ensaño hasta el extremo con Jesús de Nazaret?
¿El
enfrentamiento y el sacrificio de los gladiadores ordenado por el pulgar de los
césares, por qué provocaba ese gozo en los espectadores, como todavía sucede
con los toros, la lucha libre y el box?
¿El
Imperio Romano y después el Imperio Otomano podrían haber florecido si no fuera
por un cúmulo de violencias ejercidas para someter a una gran cantidad de
pueblos en lugar de convencerlos?
¿Las
“brujas” quemadas o enterradas vivas y las atroces torturas de la Santa
Inquisición son parte de un instinto sádico presente en todas las personas o es
una enfermedad de quienes tienen poder sin límites porque son la máxima
autoridad?
¿La
masacre de los pueblos originales de América por parte de los invasores
europeos era algo que haría cualquiera en una situación similar de
desproporción de poder y capacidad técnica?
¿Era
lógico que los invasores impusieran sus creencias y destruyeran las culturales
originarias de América en lugar de aprender de ellas?
¿Qué
tanto el mestizaje latinoamericano es producto de la violación de mujeres
vulnerables por parte de hombres barbados que humillaban así a los varones
nativos?
¿Fue
necesario asesinar en su presencia a los hijos y a la esposa de Tupac Amaru,
cortarle la lengua, torturarlo y –estando vivo- tratar de arrancarle brazos,
piernas y cabeza con el uso de caballos jalándolo en distintas direcciones, tan
solo por sus afanes de independencia y su lucha por la justicia en Perú y en
América a fines del Siglo XVIII?
¿De
qué manera se relacionan los conceptos de la revolución Francesa con la
guillotina y los asesinatos que ocurrieron entre jacobinos y girondinos durante
“el período del terror” aprobado por la Convención tras el derrocamiento del
Rey Luis XVI y hasta el golpe de Estado de Napoleón?
Si
ya gobernaba a Francia y tenía riquezas y poder, ¿por qué necesitaba Napoleón
ser emperador del mundo a través de ejercer la violencia sobre los pueblos
vecinos?
¿Podría
haberse logrado la independencia política – formal de los países
latinoamericanos por alguna vía pacífica y sin tantos muertos?
¿Es
lógico que las competencias comerciales se traduzcan en guerras destructivas de
vidas y personas como ocurrió en el siglo XIX entre los países europeos?
¿Por
qué la avidez por acrecentar ganancias propicia que éstas sean más importantes
que la vida de otros seres vivos, incluso de la misma especie?
¿Es
más la desesperación ante la carencia o lo es la enfermedad del egoísmo lo que
desata la violencia?
¿Por
qué los seres humanos no pudieron prever y evitar dos guerras mundiales que
devastaron mucho de lo que habían construido y dejaron inconmensurables
traumatismos corporales, emocionales y sociales?
¿De
dónde surgió el odio y la crueldad de los alemanes nazis contra los judíos, los
homosexuales y los negros?
¿Por
qué Hitler quería imponer su voluntad a todos los seres humanos y no dejar que
cada quien tuviera su manera de ser propia?
¿Cómo
entender ese bombardeo cruel y desproporcionado de los franquistas sobre la
población civil de Guernica con tal de someter a los españoles a la voluntad de
unos cuantos?
¿Cómo
decidió Harry Truman asesinar a más de 200 mil japoneses mediante dos bombas
atómicas?
¿Los
Estados Unidos tenían tanta fobia a la Unión Soviética y a China por su enorme
crecimiento económico y militar que tuvieron que aplicar el “mercantilismos”
para perseguir y asesinar a quienes tuviera ideas comunistas?
¿Es
por esa fobia o por simples intereses comerciales que el gobierno
norteamericano derrocó a Jacobo Arbenz en Guatemala en 1954, invadió sin éxito
a la Cuba revolucionaria en 1961 y se ensaño con Vietnam durante 10 años (1964
– 1975) lanzando Napalm a las poblaciones civiles, sin lograr imponerse?
¿Por
esa fobia es que asesinaron a John y a Robert Kennedy y a Martin Luther King en
los años 60?
¿Fue
por ese contagio de la mentalidad estadounidense que Gustavo Díaz Ordaz ordenó
la intervención del ejército que masacró, encarceló y torturó a los
universitarios mexicanos en 1968?
¿Fue
esa misma insana pasión de los gobiernos mexicanos la que asesinó a Rubén
Jaramillo (1962), a los insurgentes de Madera (1965), a Genaro Vázquez (1972),
a Lucio Cabañas (1974), y desapareció para siempre a muchos jóvenes como Jesús
Piedra Ibarra (1974)?
¿De
qué manera se formaron las ideas y las emociones de los militares que
impusieron crueles y sanguinarias dictaduras en casi todos los países de
América latina en los años 60 y 70?
¿Qué
pensaba y qué sentía Pinochet el 11 de septiembre de 1973 mientras los aviones
bombardeaban el Palacio de la Moneda y los tanques militares rodeaban el área
para asesinar al Presidente salvador Allende junto a un pequeño grupo de
civiles que tenía apenas unas cuantas metralletas para defenderse?
¿Qué
pasaba en la mente de los militares chilenos y argentinos que secuestraban
posibles subversivos (jóvenes universitarios con anhelos de justicia y
democracia) para torturarlos de manera extenuante y a muchos tirarlos vivos
desde helicópteros en medio del océano?
¿El
gobierno chino no pudo concebir alternativas políticas más eficaces que
asesinar masivamente a los jóvenes que demandaban democracia en la Plaza de
Tian´anmen en 1989?
¿Qué
tan amenazantes eran para el gobierno Salvadoreño los tres académicos y sacerdotes
jesuitas que junto con el psicólogo Ignacio Martín-Baró fueron asesinados
brutalmente el 16 de noviembre de la Mara Salvatrucha?
¿La
Yugoslavia integrada por Tito tenía que caer en ese sectarismo acendrado que
literalmente despedazó comunidades y familias de serbios, croatas y bosnios?
¿Es
imposible encontrar la manera de distribuir el territorio para la coexistencia
pacífica de palestinos e israelitas, disminuir los rencores y evitar el
desmembramiento continuo de familias?
¿Para
supuestamente detener la sanguinaria dictadura de Sadam Hussein en Irak, era
necesario que el ejército norteamericano asesinara y torturara a muchos más
iraquís que él y hundiera a la población en la pobreza y en una guerra
interminable?
¿Qué
tipo de sentimientos tenían quienes decidieron morir al estrellar un par de
aviones de pasajeros en las Torres Gemelas de Nueva York y con ello inaugurar
icónicamente el tercer milenio?
¿Cómo
el resentimiento acumulado llevó a dos adolescentes, que habían sido humillados
y violentados reiteradamente por algunos compañeros, a usar dos escopetas, una
pistola y alguno explosivos para asesinar a 15 personas y herir a otras tantas
que estaban en la cafetería y en la biblioteca de la Escuela Secundaria
Columbine el 20 de abril de 1999?
¿Qué
vivencias psicológicas derivan en esos asesinatos masivos que han ocurrido en
diversas escuelas cada vez con más frecuencia, principalmente en Estados
Unidos?
¿Cómo
entender el porqué de la esquizofrenia que, en combinación con una droga tomada
voluntariamente, propició que James Holmes se asumiera como el “Guasón” para disparar contra el público que acudía al
estreno de la película de Batman, en Aurora, Colorado, el 20 de julio de 2012?
¿Cómo
puede un jurado colectivo en Texas tener la sangre fría para decidir la pena de
muerte contra un reo, sometido e indefenso?
¿Por
qué varios policías de los Ángeles disfrutan de golear hasta muerte a una
persona de raza negra cuando ya la tienen subyugada?
¿Es
la naturaleza humana, eterna e inmutable, lo que no permite la fraternidad, la
paz y la cooperación tan anheladas como reiteradas?
¿Hay
algún tope en los niveles de violencia posibles o ésta puede seguir creciendo
de manera infinita?
¿Realmente
los seres humanos son tan poco inteligentes que podrían acabar con su propia
especie y, de paso, con la vida surgida de miles de millones de años de
evolución?
¿Qué
hay de común en todas esas violencias que han traumatizado a nuestra especie?
¿Qué
pasaría si los seres humanos lograran la fórmula para respetar a los demás y
cooperar entre sí de manera sistemática?
¿En
qué medida la psicología, como ciencia y profesión, puede estudiar y contribuir
a esa modificación de actitudes?
Son
muchas las preguntas y difíciles las respuestas. Hay que empezar con los niños
y niñas, dicen algunos. Pero su educación depende de padres y maestros, quienes
a su vez están rendidos a políticas públicas diseñadas y aplicables por miopes
gobernantes, mal educadas y enfermas de poder. Es la serpiente que “se muerde
la cola”. Es necesario comenzar por todos lados para intentar detener esa
milenaria ola de barbarie que amenaza con arrastrarnos
En
este libro, tomos I y II, un conjunto de destacados psicólogos de varios países
latinoamericanos reúnen sus reflexiones, análisis e investigaciones sobre el
fenómeno de la violencia, en búsqueda de alternativas para comprender sus
causas y poder así diseñar formas de prevención y posibilidades de
afrontamiento puestas a disposición de los profesionales de la psicología, de educadores (docentes y
padres de familia), de líderes sociales e incluso de gobernantes sinceramente
interesados en hacer algo para detener esa psicosis en que van cayendo las
sociedades y hacer posible esa otra humanidad fraterna cuyo horizonte luminoso
se antoja a nuestro alcance, para que puedan cabalmente disfrutarla y estar
orgullosamente emocionados de ella nuestros nietos o, si no, los suyos
Marco Eduardo Murueta Reyes, en
el texto Alternativas Frente a la violencia social, explica el porqué de la
violencia desde una perspectiva filosófica, cuestionando las posturas que
platean a la agresividad y la violencia inherentes al ser humano. Nos dice, “Equivocadamente
se cree que la violencia de unos podrá detenerse con una mayor violencia de
otros, lo que provoca una vorágine creciente de actos crueles y agresivos, de
desconfianza mutua y preparación para la defensa, generando arsenales que al
usarse acabarían con todos los seres vivos”. Señala, desde la teoría de la
Praxis, que esas interpretaciones y propuestas de manejo generan estados de
tensión, confusión, enajenación y neurosis. Propone que la agresividad y
violencia destructiva se originan debido a la ocurrencia de 10 factores, de
intensidad, duración y frecuencia diversa, señalando la urgencia de diseñar
políticas públicas dirigidas a disminuirla y crear una nueva etapa social que
posibilite “el avance hacia una era gloriosa de la humanidad” resultado de la
integración y organización cooperativa de los habitantes del planeta como
prueba de su inteligencia para armonizar los esfuerzos en beneficio de todos,
es decir, para beneficio de sí misma
Para Javier Uribe, en
su trabajo CONSIDERACIONES SOBRE LA VIOLENCIA, ésta
es un campo representacional en donde confluyen diversas concepciones sobre la
sociedad, las relaciones sociales y el derecho a la vida, por lo que es
necesario abordar su estudio tal como aparece en el pensamiento social y no
sólo como es investigado por los especialistas, de manera fragmentaria y
limitada; presenta a la teoría de la representación social como una de las vías
para comprender cómo el sujeto social se apropia de su realidad,
reconstruyéndola, y analizando cuáles son los diversos significados que la
violencia tiene para los diversos grupos sociales. Menciona que se tiene la
impresión que existe un significado unívoco acerca de las violencias, sin
embargo, se observa que existen diferencias matices y distintas
interpretaciones de acuerdo a los grupos sociales a los que se pertenezca, a su
lugar dentro del proceso de producción, a su pertenencia y posición social.
Propone un análisis de la violencia desde esta teoría, estableciendo que
alrededor de la violencia existen prácticas y discursos que pueden ser
interpretados Y / o justificados de diferentes maneras dependiendo del
contexto, la situación, los actores de la violencia involucrados y de aquellos
en los que ésta recae, ya que “la violencia será juzgada tomando en
consideración las normas y los valores sociales vigentes en el marco de lo
social”
Edgar Barrero desarrollo
cinco grandes tesis acerca de la forma como psico-históricamente se ha venido
configurando en unos grupos humanos, ese gusto y ese placer con la muerte y/o
desaparición física o simbólica del otro distinto; teniendo como trasfondo la
difícil situación de conflicto armado que por décadas ha padecido el pueblo
colombiano. El ensayo muestra cómo, sin darnos cuenta, estamos atrapados en esa
ESTÉTICA DE LO ATROZ cuando hemos naturalizado y
aceptado social y culturalmente, hechos a todas luces injustificables como la
limpieza social, la exclusión deshumanizante, el racismo y el sometimiento a
crueles condiciones de existencia. Desde la perspectiva de la psicología
política latinoamericana, se llama la atención sobre el rol de la psicología
frente a este tipo de fenómenos violentos y sobre la necesidad de construir una
nueva ética de la resistencia que ponga el saber psicológico al servicio de una
estética de la existencia digna y del buen vivir de todos los seres humanos sin
ningún tipo de discriminación
Manuel Eduardo Cueva Rojas, pone
a nuestra consideración una propuesta de clasificación del maltrato, resultado
de lecturas y diálogos con colegas interesados en el tema, según el ámbito
donde se desarrolla, la persona maltratada, el tipo de acto maltratante, y los
daños y consecuencias que origina. Desde su punto de vista, las actuales
tipificaciones generan confusión y dan la impresión que, dada la complejidad
del problema, no hacen referencia al criterio del cual nacen, observando un
vacío y una tendencia a meter en un solo saco papas, camotes y alfajores por lo
que en su trabajo APROXIMACIÓN A LA COMPRENSIÓN DEL
MALTRATO, partiendo de su definición, explora las características y tipos
tomando en cuenta diferentes criterios de categorización para, finalmente,
puntualizar sobre algunos elementos vinculados a él como la dinámica de la
violencia y los aspectos culturales que la sostienen
La
agresividad es una problemática actual de rigen multicausal cuyo estudio es
necesario tanto para su comprensión como para el planteamiento de alternativas
para la disminución de sus variantes patológicas. De acuerdo a Ferrán Padrós Blanquéz y su equipo de colaboradores de
la facultad de Psicología de la Universidad Michoacana de San Nicolás de
Hidalgo, en su texto titulado: TRASTORNO DISOCIAL: UN
ORIGEN DE LA AGRESIVIDAD PATOLÓGICA, la agresividad puede manifestarse
en formas desviadas o patológica, la agresividad puede manifestarse en formas
desviadas o patológicas, causada por la presencia de un trastorno, en el cual,
el individuo muestra patrones de comportamiento que violan los derechos de los
otros y las normas sociales que no sólo aluden a la manifestación alterada de
la agresividad en sus diferentes formas como insultos, peleas, robos, etc.,
sino que incluyen diversas formas de conducta desadaptada como provocación de
incendios, holgazanería extrema, y continuo quebrantamiento de las normas del
hogar y la escuela por lo que es considerado una de las formas disruptivas que
en un elevado porcentaje evolución en trastorno antisocial de la personalidad,
uno de los trastornos que se caracterizan, entre otros criterios, por
comportamientos agresivos en la edad adulta
De
acuerdo a Luz Anyela Morales Quintero, la
principal lección que podemos aprender, es que a pesar de que la delincuencia
violenta existe como un extremo poco esperanzador para la humanidad, hay
evidencia de la posibilidad de modificarla y lograr disminuir su probabilidad
de ocurrencia. Con lo anterior, las expectativas de cambio en conductas menos
graves es aún mayor por lo que es necesario identificar las características de
los programas más efectivos y de aquellos que no funcionan o que incluso pueden
tener resultados adversos, a fin de identificar los elementos claves a tenerse
en cuenta para la prevención de la violencia. El capítulo, TRATAMIENTO DE LA DELINCUENCIA VIOLENTA: LECCIONES QUE
PODEMOS APRENDER, presenta el estudio de la conducta antisocial más
extrema y persistente, que incluye delitos como el homicidio, el secuestro, el
asalto agravado y otras acciones ilegales que implican amenaza mediante el uso
de la fuerza o las armas. Sin duda, comprender el extremo de la delincuencia
violenta y reconocer lo que ha funcionado para reducirla, puede ofrecer claves
tanto para la explicación como para la prevención de la violencia en general,
reconociendo la importancia de admitir nuestra naturaleza compasiva y prosocial
que hace posible generar comportamientos alternativos a la violencia
Liliana Álvarez, con
amplia experiencia como perito psicóloga del Tribunal de Menores y como
Directora de la Cátedra Canadá de derechos del Niño, Asociación Argentina de
estudios Canadienses, en su trabajo JÓVENES EN
CONFLICTO CON LA LEY PENAL: NIÑEZ Y VIOLENCIAS, analiza las nociones de
culpa y responsabilidad desde el Derecho, ubicando a la violencia como un
problemática de profunda complejidad psicosocial, en términos paternos de la
legalidad. Para ello, revisa el cambio sustancial que se ha dado en la Argentina
con respecto a los jóvenes que han infringido la ley, en la cual han dejado de
ser menores tutelados, objetos de derecho, para ser considerados sujetos de
derechos y de responsabilidades. Inicialmente, hace una revisión bibliográfica
para, posteriormente, confrontar la información con los hallazgos encontrados
en una investigación realizada con instrumentos canadienses, pensados a la luz
de políticas garantizadoras de Derechos Humanos, centradas en evaluar la
capacidad de los jóvenes para enfrentar el juicio penal
Concluye
que el tener en cuenta, a la luz de la criminología crítica, el análisis de los
dispositivos y las falencias de comunicación en el sistema jurídico
Benigna Tenorio Cansino y
su equipo de investigación, señalan que el maltrato infantil ha estado presente
en toda la historia de la humanidad. No obstante, en la actualidad, la
violencia en su contra constituye un grave problema psicosocial ya que un
importante sector de esta población es víctima de abusos, la mayoría de las
veces por sus propios padres o maestros. Asimismo; el tema ha sido abordado
desde diversos ámbitos profesionales; el psicoanálisis ha intentado dar
respuesta a la problemática, analizando y explicando la compleja trama de la
violencia considerando que la agresión y la violencia constituyen una
manifestación dela pulsión de muerte inherente a todo sujeto que se opone a la
pulsión de vida, tendiente no a la unión y a la destrucción, aniquilamiento del
otro y del sujeto mismo. Los autores, en su propuesta, EFECTOS
DE LA VIOLENCIA EN LA SUBJETIVIDAD INFANTIL; hacen énfasis en que la
exposición del niño a la violencia, y sobre todo el maltrato, silencia: en el
lugar del decir, aparece el golpear y el ser golpeado. Lo real del cuerpo
obstruye lo simbólico y, en ese momento, hace desaparecer todo el entramado que
sostiene al sujeto
La
fuerza del golpe o del insulto deja marcas sobre el cuerpo, en tanto objeto, el
que continúa haciéndolo y pasa a ser el que tiene que triunfar o aguantar y
sufrir
Abordar
temas relacionados con la violencia y los jóvenes nunca resulta fácil, sobre
todo, porque es una cuestión que interpela acerca del bienestar que las
sociedades le aseguran a este sector por lo que Ma. Teresa González Herrera, en
el trabajo titulado: PARTICIPACIÓN DE NIÑOS Y JÓVENES
EN LA VIOLENCIA RELACIONADA CON EL NARCOTRÁFICO EN MÉXICO: NOTICIAS EN LA
PRENSA Y LA ATRIBUCIÓN DE SUS ACTOS presenta un análisis con respecto al
problema de su intervención en la violencia relacionada con la delincuencia
organizada y la manera en que diversos personajes sociales explican su
comportamiento, es decir, estudia las inferencias a sus causas para suponer sus
motivos, mediante la revisión del contenido de las noticias sobre estos temas.
Su propósito es identificar, desde la teoría de la atribución, la manera como
se presentan las opiniones que atribuyen a la violencia elementos intrínsecos o
extrínsecos, es decir, a las disposiciones internas, como los rasgos duraderos
de la personalidad, actitudes o motivos o las situaciones externas, a saber, el
contexto que podría estar relacionado con la conducta de las personas
Damaris Díaz Barajas y Marisol Morales Rodríguez presentan los resultados del
estudio SIGNIFICADO PSICOLÓGICO DE VIOLENCIA EN UNA
MUESTRA DE ADOLESCENTES Y JÓVENES MEXICANOS; el cual se llevó a cabo en
una muestra de 300 sujetos en un rango de edad de 10 a 30 años. El objetivo fue
identificar el significado que le otorgan a la palabra violencia a fin de
examinar las diferencias y similitudes que se presentan a lo largo de las
diferentes etapas del desarrollo de la vida ya que consideran que la violencia,
al implicar una temática amplia y meticulosa que hace referencia a un tipo de
comportamiento transgresor que tiene lugar en todas partes impidiendo el normal
desarrollo del ser humano, no está en nuestro legado evolutivo, ni en nuestros
genes por lo que conviene abordar cómo es conceptualizada. Los hallazgos
sugieren que en las etapas de edad hay similitud en las palabras definidoras
golpes, maltratos, agresión y muerte; así también, se observaron diferencias en
cuanto a los significados psicológicos en las diferentes etapas: de los 10 a
los 18, aparece la palabra bullying, pelea y sangre; en las edades de los 15 a
los 30, es común la palabra gritos; y finalmente entre los 19 a 30 años las
palabras definidoras usuales son dolor, miedo y humillación. También los
resultados muestran que conforme aumenta la edad, es mayor el tamaño que tiene
la red
IMPACTO NEGATIVO DEL ARMAMENTISMO EN REPÚBLICA DOMINICANA es el trabajo donde Mayra Brea y
Edylberto Cabral Ramírez reportan como la incidencia de las armas de fuego
influye en el aumento de la criminalidad en República Dominicana. Abordan los
efectos nocivos de la violencia armada en el desarrollo humano y social,
especialmente en Latinoamérica y El caribe, para ello, muestran la evolución
creciente del tráfico legalizado de armas y cómo este auge se produce simultáneamente
con un crecimiento inusitado de la violencia y la inseguridad ciudadana a
partir de cuatro consideraciones:
1)
La
proliferación de armas de fuego como facilitador de violencia
2)
El recrudecimiento del armamentismo a partir
de las facilidades y apertura al tráfico, acceso
y legalización de las armas de fuego en la población civil
3)
La percepción de inseguridad como factores que
predisponen a adquirir armas de
fuego; y
4)
La proliferación de armas de fuego que coadyuva
notablemente al aumento de la
violencia
El
procedimiento metodológico utilizado para el estudio partió de fuentes mixtas
de información y de un marco de referencia bibliográfico internacional sobre
los efectos de la violencia armada en el desarrollo mundial y en la región
latinoamericana, del cual, se analizan estadísticas de diversas fuentes con el
propósito de descubrir la estrecha vinculación entre ambos fenómenos con fines
explicativos. DESDE EL MUNDO DE MATRIX: RAZONAMIENTO,
OPERACIONES RACIONALES Y VIOLENCIA EN EL PERÚ; es el trabajo en el que
Jorge Solari Canaval plantea como, desde la educación formal del Perú, se
establecen los constructos culturales que llevan a interpretar las acciones
como una “realidad” incuestionable debido a la falta de desarrollo de
habilidades del pensamiento que permitan a los estudiantes elegir formas de
vida diferentes. Para ello, se definen las bases del razonamiento y las cinco
operaciones relacionadas con él y sus posibles implicaciones en problemáticas
como la violencia, a partir de la analogía con diversas películas y programas televisivos.
En la película, Matrix, el eje central de su reflexión a partir del
establecimiento de la posibilidad de diferenciar entre lo “real y la libertad”.
¿Es el ser humano libre de elegir su futuro, su vida, o hay un destino que
predetermina todo lo que va a ocurrir? Esta es la gran pregunta en la que se
debate Neo, el protagonista, así, su trayectoria está sembrada de elecciones:
¿pastilla roja o azul?
Concluye
diciendo que es el mundo de percepciones, razonamiento y toma de decisiones en
el que vivimos, lo primero por lo que tendríamos que apostar si es que nos
interesa hacia dónde estamos yendo
Para
establecer aspectos relevantes en cuanto a la violencia, sus estrategias de
afrontamiento y alternativas de solución como una construcción de salud mental
en el colectivo social boliviano
Rubén
Carlos Tunqui Cruz, en el trabajo VISIBLEMENTE INMOVILIZADOS. REALIDADES DE LA SITUACIÓN DE VIOLENCIA EN EL CONTEXTO
BOLIVIANO, señala que nos encontramos frente a una realidad en la que se
han diseñado las normativas y los procedimientos legalmente reconocidos para
una adecuada intervención a las personas en situación de violencia doméstica y
familiar, plasmadas en la nueva Constitución Política de estado Plurinacional
de Bolivia que reconoce y garantiza a las personas, a una vida sin violencia
física, psicológica, sexual y económica. Asimismo, describe los programas
nacionales de lucha contra la violencia y la situación actual de los Servicios
Legales Integrales Municipales, además de los planes y políticas y la situación
de violencia y género, atención integral a las mujeres adultas y adolescentes
víctimas de violencia sexual
Afirma
que todo este bagaje no tendrá asidero alguno si se obvian aspectos inherentes
a los marcos jurídicos o normativos en cuanto a la atención y los protocoles
específicos de atención desde distintos escenarios. Situaciones que expone a
partir de las informaciones publicadas por instituciones gubernamentales y
ONG´s relacionadas con la temática en estos últimos años
Mario
Orozco, David Pavón, Flor Gamboa, Alfredo Huerta, Jeannet Quiroz y Martín
Alcalá, señalan que la violencia es propiamente humana y entonces propiamente
social. En su trabajo, VIOLENCIA TERRITORIAL,
EMERGENCIA DE VÍCTIMAS Y DAÑO SUBJETIVO, proponen que, desde una
perspectiva psicoanalítica, si hay algo que hace presuntamente o
presuntuosamente gozable el ejercicio de la violencia es que responda a un
ideal que puede sustentar su sentido heroico, legítimo, vindicativo o
reivindicativo. La violencia en nombre de un ideal, puede que responda a un
ideal territorial, a un ideal de expansión, de dominio territorial y, en ese
sentido, tiene un trasfondo narcisista donde el Yo anhela su ampliación de
dominio. Entonces el territorio es fundamental para el desencadenamiento de la
agresión: mientras más se sienta la especie dentro de su propio ámbito
territorial, más se dispone a responder agresivamente inter-especifica en los
animales; éstos defienden su territorio como si fuera algo adosado a su propio
organismo, lo defienden a muerte porque de ese lugar depende la conservación de
la vida
Elizabeth Castañón García en
el texto: LAS RELACIONES DE VIOLENCIA: DINÁMICA DE VIDA
EN LAS PRISIONES, aborda la forma en que se entretejen las relaciones
interpersonales en la vida de un interno en un Centro de Readaptación Social,
del proceso de socialización al que se enfrentan y que, a partir de su
reclusión, es parte de su cotidianidad, y también, elemento primordial para
lograr una salida anticipada; afirma que el sistema en las prisiones
tradicionales son el rigor y la opresión donde el individuo que se encuentra en
prisión, se encontrará con un sistema con grandísimas carencias visibles desde
lo normativo, lo arquitectónico y lo funcional, lo cual conlleva a múltiples
problemáticas institucionales e internas que repercuten en la transformación de
su personalidad. La vida cambia de manera significativa y rotunda así como sus
posibilidades de reinserción a la familia y a sus grupos sociales; la cárcel es
una forma estigmatizaste en el interno, por una parte las vivencias que de ahí
se lleva lo marcarán en su forma de pensar, de sentir y de socializar, el
etiquetamiento, a partir de los antecedentes no penales, limitará sus
posibilidades de desarrollo social, por lo que es importante no dejar de ver el
panorama de prisiones como un espacio de urgente intervención por los
profesionales de psicología
LA TORTURA Y EL PROTOCOLO DE ESTAMBUL: UNA PERSPECTIVA PSICOLÓGICA; es el trabajo que José Manuel
Bezanilla y María Amparo Miranda nos presentan. En él, consideran que la
tortura es un fenómeno que ha estado omnipresente en la historia de la
humanidad y se manifiesta de maneras sumamente complejas que tienen
repercusiones tanto en los ámbitos personal, familiar, comunitario, social,
legal, histórico y cultural y en los últimos años, diversos organismos
internacionales se han abocado a establecer políticas dirigidas a erradicarla
estableciendo los lineamientos para su prevención y manejo ya que, desde una
perspectiva psicológica, su ejercicio, al pretender la anulación de la voluntad
y estructura psíquica de las personas, conlleva intrínsecamente a despojarse de
aquello que la hace humana, transformándola en un objeto a merced y expensas
del torturador, en un ejercicio que podría entenderse como un acto de “perversión”
Desde
una perspectiva psicoanalítica, los autores señalan que la base de las
sintomatología y comportamientos neuróticos se fundamentan en la actuación de
las estructuras defensivas de la psique sobre las pulsiones, fundamentalmente
la represión, por lo que la neurosis es considerada una perversión en negativo;
es decir, que el neurótico fantasea lo que el perverso actúa considerándola
como la manifestación en bruto y no reprimida de la sexualidad infantil, lo que
dificulta una adecuada integración de la personalidad y puede ubicar a las
personas con esta estructura de la personalidad con características cercanas a
la psicosis
Marco Eduardo Murueta
Mario Orozco Guzmán
ÍNDICE:
= AGRADECIMIENTOS
= IN
MEMORIAM FRANCISCO JAVIER URIBE PATIÑO
= SEMBLANZA
CURRICULAR DE LOS AUTORES
= INTRODUCCIÓN
CAPÍTULO 1
ALTERNATIVAS FRENTE A LA VIOLENCIA
SOCIAL DESDE LA TEORÍA DE LA PRAXIS
Marco Eduardo Murueta Reyes
=
¿Por qué una persona actúa violentamente?
= “Libre albedrío”, violencia y Estado
Neurosis
y violencia
= Factores
que producen agresividad y violencia destructiva
= La
violencia social no tiene madre… (Ni padre)
= Políticas
públicas para disminuir la violencia
y
generar una nueva etapa social
= Referencias
CAPÍTULO 2
CONSIDERACIONES SOBRE LA VIOLENCIA
Francisco Javier Uribe Patiño
= El
prisma de la agresividad y la agresión
= La
violencia y su problematización
= Percepción
del otro
= Violencia
cotidiana
= Reconocimiento
social
= Enfoque
estructural para el estudio
de
las representaciones sociales
= Índice
de normatividad / funcionalidad
= Puntualizaciones
= Referencias
CAPÍTULO 3
DE LA POLARIZACIÓN SOCIAL
A LA ESTÉTICA DE LO ATROZ
Edgar Barrero Cuéllar
= La
configuración psicosocial del gusto con la atrocidad
= La
naturalización y enraizamiento de la violencia
= Elites
políticas, poder y polarización social
= La
crueldad en los cinco cuerpos
= El
tránsito de la polarización
social
a la estética de lo atroz
= Hacia
una ética de la resistencia
desde
la psicología latinoamericana
= Referencias
CAPÍTULO 4
APROXIMACIÓN A LA COMPRENSIÓN
DEL MALTRATO
Manuel Eduardo Cueva Rojas
= Definición
= Tipificación
= Dinámica
de la violencia
= Conclusiones
CAPÍTULO 5
TRASTORNO DISOCIAL:
UN ORIGEN DE LA AGRESIVIDAD PATOLÓGICA
Ferrán Padrós Blázquez, Fátima Paulina Rosiles Leyva
Elizabeth Hernández Luján, Ixchel Herrera Guzmán,
María Patricia Martínez Medina, Esteban Gudayol Ferré,
Erwin Rogelio Villuendas González
= Nuestro
contexto
= Trastorno
disocial (TD)
= Epidemiología
del TDC
= Comorbilidad
y problemas asociados al TD
= Etiología
del TDC
= Callo
emocional, un caso especial
= Evaluación
del trastorno disocial
= Curso
y pronóstico del trastorno disocial
= Prevención
y tratamiento del trastorno
disocial
de la conducta
= Referencias
CAPÍTULO 6
JÓVENES EN CONFLICTO CON LA LEY PENAL:
NIÑEZ Y VIOLENCIAS
Liliana Edith Álvarez
= Delincuencia
violenta
= Factores
asociados al inicio y mantenimiento
de
carreras delictivas violentas
= Factores
de protección
= Desistimiento
en las carreras delictivas
= Resultados
del tratamiento
dirigido
a delincuentes violentos
= Características
de programas exitosos
= Programas
menos efectivos
= Lecciones
que podemos aprender
= Referencias
CAPÍTULO 7
DELINCUENCIA VIOLENTA:
LECCIONES QUE PODEMOS
APRENDER PARA PREVENIRLA
Luz Anyela Morales Quintero
= Legalidad
y función paterna
= La
transgresión de la ley social: el acto transgresor
= Acerca
de las condiciones de producción
de
vulnerabilidad y violencia
= Respuestas
del sistema jurídico: Sistema
de
responsabilidad penal juvenil
= Acerca
de la responsabilidad
= El
proceso penal como espacio
de
ficción subjetivamente
= Acerca
de las prácticas
= La
investigación
= Reflexiones
finales
= Referencias
CAPÍTULO 8
EFECTOS DE LA VIOLENCIA EN LA
SUBJETIVIDAD INFANTIL
Benigna Tenorio Cansino, Martín Jacobo Jacobo,
Ireri Yunuen Vázquez García, María del Carmen Manzo Chávez
= Modalidades
de violencia contra los niños
= Lo
familiar de la violencia
= Efecto
temprano de la violencia
= Impacto
de la violencia en la infancia
= Conclusiones
= Referencias
CAPÍTULO 9
PARTICIPACIÓN DE NIÑOS Y JOVENES
EN LA VIOLENCIA RELACIONADA
CON EL NARCOTRÁFICO EN MÉXICO:
NOTICIAS EN LA PRENSA
Y LA ATRIBUCIÓN DE SUS ACTOS
María Teresa González Herrera
= Violencia:
un concepto y múltiples facetas
= Contexto:
la violencia a la que nos referimos
= Niños
y jóvenes: ¿víctimas o victimarios?
= Teoría
de la atribución y aportes de la psicología
= Mensajes
y atribución de actores determinados
= Jóvenes:
creación de alternativas a la violencia
= Reflexiones
finales
= Referencias
CAPÍTULO 10
SIGNIFICADO PSICOLÓGICO DE VIOLENCIA
EN UNA MUESTRA DE ADOLESCENTES
Y JÓVENES MEXICANOS
Damaris Díaz barajas, Marisol Morales Rodríguez
= Método
= Resultados
Discusión
= Conclusiones
= Referencias
CAPÍTULO 11
IMPACTO NEGATIVO DEL ARMAMENTISMO
EN REPÚBLICA MEXICANA
Mayra Brea de Cabral, Edylberto Cabral Ramírez
= Introducción
= Objetivos
= Generalidades
y particularidades del armamentismo
= Efectos
negativos de la violencia armada
= Homicidios
y armas de fuego en América Latina
= Proliferación
de armas en manos
de
civiles en República Dominicana
= Armas
legales: un riesgo mortal y una fuente
de
abastecimiento del tráfico ilegal de armas
= Percepción
de inseguridad y motivación
hacia
las armas de fuego
= Incidencia
de las armas de fuego
en
la violencia y criminalidad
= Rol
de las armas de fuego en las muertes violentas
= Otro
escollo de las armas: el aumento
de
heridos por balas de 2000 a 2011
= Conclusiones
= Sugerencias
= Referencias
CAPÍTULO 12
DESDE EL MUNDO DE MATRIX:
RAZONAMIENTO, OPERACIONES
RACIONALES Y VIOLENCIA EN EL PERÚ
Jorge Ricardo Solari Canaval
= Cuatro
elementos base del razonamiento
= Operaciones
racionales
= Funciones
del pensamiento
= Conclusión
= Referencias
CAPÍTULO 13
VISIBLEMENETE OCULTOS; REALIDADES
DE LA SITUACIÓN DE VIOLENCIA
EN EL CONTEXTO BOLIVIANO
Rubén Carlos Tunqui Cruz
= Estado
plurinacional de Bolivia sin violencia
= Programa
Nacional de lucha contra la violencia de género
= Marco
normativo o jurídico legal
= Situación
actual de los servicios legales integrales en Bolivia
= Sistema
municipal de información de violencia
= Planes
y políticas para la adolescencia y juventud
= Violencia,
salud sexual e igualdad de género
en
adolescencia y juventud (estadísticas)
= Atención
integral a adolescentes
víctimas
de violencia sexual
= Conclusiones
= Referencias
CAPÍTULO 14
VIOLENCIA TERRITORIAL,
EMERGENCIA DE VÍCTIMAS
Y DAÑO SUBJETIVO
Mario Orozco Guzmán, David Pavón Cuéllar,
Flor de María Gamboa Solís, Alfredo Emilio Huerta Arellano,
Jeannet Quiroz Bautista, José Martín Alcalá Ochoa
= Introducción
= Violencia
y territorio
= Paternidad
y maternidad
= Muerte
y duelo
= Víctimas
y culpables
= Miedo
y subjetividad
= Referencias
CAPÍTULO 15
RELACIONES DE VIOLENCIA:
DINÁMICA DE VIDA
Elizabeth Castañón García
= Sistema
penitenciario
= Violencia
en las prisiones
= Conclusiones
en general
= Referencias
CAPÍTULO 16
LA TORTURA Y EL PROTOCOLO DE ESTAMBUL:
UNA PERSPECTIVA PSICOLÓGICA
José Manuel Bezanilla, maría Amparo Miranda Salazar
= Perspectiva
psicológica de la tortura
= Perspectivas
social y antropológica de la tortura
= Perspectiva
social y antropológica de la tortura
= Instrumentos
para la documentación de a tortura
= Conclusiones
= Referencias
Índice
FICHA TÉCNICA:
1
Libro
288
Páginas
En
formato de 16.5 por 23 cm
Pasta
delgada en color plastificado
390
gramos
ISBN
9786074484427
Autor
Marco Eduardo Murueta y
Mario
Orozco Guzmán
Editor
Manual Moderno
FAVOR DE PREGUNTAR
POR EXISTENCIAS EN:
Correo
electrónico:
Celular:
6671-9857-65
Gracias
a Google por publicarnos
PSICOLOGIA DE LA VIOLENCIA
CAUSAS PREVENCIÓN Y
AFRONTAMIENTO
Autor
Marco Eduardo Murueta y
Mario
Orozco Guzmán
Quedamos
a sus órdenes
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